Benjamín Ferreyra, de Aristóbulo del Valle, es el ganador Número 100 de IPLyC Social Inclusivo. Con el dinero del premio hará arreglos en la casa y un regalo para su nieta.
Benjamín posee el Certificado Único de Discapacidad (CUD) porque en 2005 sufrió un accidente mientras conducía una cosechadora de té. Esto le produjo graves heridas en una de sus piernas, que quedó cinco centímetros más corta.
Por lo general, “hacía varias tareas a la vez, y de un momento a otro, quedé postrado a lo largo de dos años, casi sin poder moverme, dependiendo de otros. Fui sometido a más de diez cirugías. Eso fue muy difícil para mí”, manifestó el beneficiado. Destacó que el acompañamiento y apoyo de la familia (hermanos, esposa y su padre, que ya no está) fue “lo principal”.
Comentó que carece de tendones y de movilidad en el pie afectado. “Tengo que usar un zapato ortopédico que hoy no dispongo porque es muy caro mandar a hacer uno. Hago pequeños trabajos, pero es muy difícil en estas condiciones”.
Recordó que el accidente fue “grave y eso me bajoneó bastante, pero con la ayuda de la familia y confiando en Dios se puede salir adelante. Luchando y con fe, se puede. Esta iniciativa del IPLyC es de gran ayuda, es una muy buena idea, en mi caso me viene muy bien. Estaré eternamente agradecido. A la gente, le digo que confíe y que sepa que es una realidad”.
Amante del fútbol desde niño, dijo que, al enterarse del premio, “me entraron las dudas y los nervios. Pero cuando supimos que había antecedentes de ganadores en la ciudad, cuando estuvimos seguros, queríamos que llegue el día de la entrega. Esto es una felicidad, porque es de gran ayuda”.
Sostuvo que al efectivo “queremos darle un uso correcto, así que lo usaremos para ultimar detalles de pintura tanto en las rejas como en la vereda de la casa. Además, levantar un muro para tener mayor seguridad y hacerle un regalito a mi única nieta” que es su debilidad.
Ferreyra, que vive de su pensión y de los tejidos que confecciona y comercializa su esposa, confió que “nunca pensé que iba a ganar. Siempre compramos números de rifa, sobre todo para ayudar a los chicos de las escuelas. Esta es la primera vez que ganamos. Es increíble, estoy muy feliz”.
