La subagente de la Agencia 308, de Apóstoles, Mirta Graciela Bernardi, se mostró feliz porque por primera vez vendió un primer premio, con la Mini Poceada.
El beneficiado del Sorteo 1226 fue un jubilado que se llevó 2.765.245, y confecciona la misma boleta desde el día que se inició este juego del IPLyC S.E.
Hace tres años que la mujer se dedica a la venta de quinielas y también trabaja en la misma Agencia, atendiendo a los clientes. Contó que toma algunas jugadas por WhatsApp a los apostadores “más fieles”, y realiza recorridas por las zonas aledañas para sumar adeptos.
“Me di cuenta que vendí el primer premio porque, como tengo clientes que hacen jugadas fijas, iba mirando el sorteo e iba tachando los números. Me puse muy feliz porque mi jugador había ganado y porque es la primera vez que vendo un primer premio”.
La propietaria, María Luján González, abrió las puertas del comercio en julio de 2012 en avenida Julián Zubrycki 67. Contó que aquí vendieron varios premios grandes de la Quiniela y otros, muy bien remunerados. Pero, por primera vez, vendió un primer premio de la Mini Poceada.
“Nos enteramos por el memo, al momento del cierre, que en nuestra agencia fue la vendedora del ticket. Nos pusimos muy felices de saber que tuvimos la oportunidad de brindar un premio así. Y más aún porque al ganador lo conocemos y es una muy buena persona”.
Al contar una anécdota dijo que “no vamos a olvidar del día que vendimos un premio grande de quiniela. Como el ganador no aparecía, comenzamos la búsqueda, hasta que lo encontramos. Era un viajante de Oberá que apostó al pasar por esta ciudad, pero cuando llegó a su casa, pusieron a lavar el pantalón y la boleta quedó reducida a papel picado. De todos modos, fue agradecido y nos trajo un obsequio porque gracias a la búsqueda se enteró que había ganado”.
